Los resultados de la edición 2015 del ranking mundial del Randstad Award global nos ha dejado dos certezas. La primera es que se consolida internacionalmente la tendencia del liderazgo de las empresas tecnológicas, ya que Microsoft, Sony y Samsung integraron el podio de las empresas más atractivas según la elección de las 225.000 personas de 23 países que participaron de la encuesta. La segunda certeza es que Microsoft, con el 67.8% de las preferencias, ha sido elegida como la más atractiva en 2015. Según palabras de Jacques van de Broek, CEO de Randstad a nivel mundial, en los 15 años de historia que posee el Randstad Award nadie había ganado el primer puesto liderando en todos los factores de atracción y retención relevados en la encuesta.
Según se desprende del informe, la gran mayoría querría trabajar en empresas de IT. Así lo indicó el 69% de los hombres y el 70% de las mujeres. ¿Por qué este liderazgo de las empresas de IT? En principio, el futuro parece estar en la tecnología. O, mejor dicho, las empresas de IT están construyendo el futuro. Los grandes players del sector, como Microsoft, Apple, Samsung o Google, se han constituido como actores centrales de un mundo en el que la tecnología atraviesa todos los ámbitos de la sociedad. Como parte del mismo proceso, la tecnología se ha vuelto más amigable, más intuitiva, menos técnica si se quiere, y por tanto más cercana al gran público. Las mujeres del mundo comienzan también a acercarse a un sector que tradicionalmente era considerado masculino.
El caso de Microsoft es emblemático. Durante el año 2012 atravesó numerosos problemas con sus empleados por el polémico stack ranking implementado por su anterior CEO, Steve Ballmer, lo que entre otras cosas afectó notablemente la consideración de Microsoft entre los candidatos. Tres años después, no solo es la empresa internacional en la que todos quieren trabajar, sino que lidera todos los factores de elección de empleador del Randstad Award a nivel global.
Más allá de esta inclinación por el sector más atractivo, el estudio relevó los principales favores de atracción y retención. ¿Por qué se irían de las empresas para las que trabajan? La falta de oportunidades de crecimiento, una baja compensación, y un mal equilibrio entre vida privada y trabajo resultaron los tres factores principales. ¿Por qué se quedarían? El equilibrio entre la vida privada y el trabajo se destaca por sobre el resto como factor de retención, seguido por salario competitivo y un trabajo flexible.
Evidentemente, las compañías de IT lideran el cambio. Y todo esto parece tener mucho sentido: los sectores de IT ya preparan autos inteligentes con los ingenieros más destacados de las empresas automotrices. El futuro, parecen decirnos, está en la tecnología. El futuro es la tecnología.