Según los resultados del segundo trimestre de 2017 del Randstad Workmonitor, 9 de cada 10 argentinos considera necesario seguir formándose, aun teniendo trabajo, para conservar o aumentar la empleabilidad. A su vez, 93% de ellos indicó que estaría dispuesto a ser capacitado nuevamente para evitar quedarse sin trabajo. Los resultados de Argentina están en línea con los del estudio a nivel global, ya que la necesidad de la formación continua es una prioridad para el 86% de los encuestados en los 33 países, mientras que el 89% está dispuesto a ser capacitado para evitar el desempleo.
En un contexto donde la tecnología y la digitalización de la economía avanzan sin pausa cruzando transversalmente todas las áreas y los procesos de las empresas, y redefiniendo cada vez más profesiones, la formación continua se presenta como la única alternativa para que los trabajadores se mantengan competitivos, a tono con un contexto de cambio permanente. Los encuestados para esta edición del Randstad Workmonitor dan cuenta de este contexto desafiante, ya que 94% de ellos afirmó que las personas desempleadas deben capacitarse lo máximo posible para que puedan ocupar los trabajos vacantes por la escasez de perfiles calificados.
Sobre estos resultados, Andrea Ávila, CEO de Randstad para Argentina y Uruguay, afirmó: “Actualmente la especialización en el trabajo ha aumentado y es necesario estar preparado para poder afrontar nuevas tareas o para aprender a hacerlas de otra manera. El impacto de la tecnología está generando grandes cambios en muchas profesiones y posiciones laborales, al punto tal que la gran mayoría de las tareas que se realizan como parte del trabajo cotidiano se ha transformado en los últimos años”.
Como emergente de este fenómeno, el desafío del trabajo del futuro empuja una mayor demanda de perfiles con formación en Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemática (STEM, por su sigla en inglés). Al respecto, Ávila afirmó: “Si algo está claro en este marco de incertidumbre sobre el futuro del mundo del trabajo, es que difícilmente un profesional pueda desarrollar su carrera en el mediano plazo sin conocer y dominar las prácticas y herramientas que la creciente digitalización de la economía y el consumo trae consigo. Este cambio de herramientas, de procesos y de sistemas para hacer las cosas incide de manera directa en los skills que se necesitan de la fuerza laboral”.
Estos datos se desprenden de la información provista por el Workmonitor, un relevamiento trimestral que realiza Randstad en 33 países del mundo entre Europa, Asia y América sobre las expectativas, estados de ánimo y comportamientos de los trabajadores. El estudio, a cargo de Survey Sampling International, se desarrolló a través de un cuestionario online sobre una muestra compuesta por personas de ambos sexos, de entre 18 y 65 años que trabajan bajo relación de dependencia más de 24 horas por semana. En Argentina la muestra está compuesta por 405 casos.