Según se desprende de los resultados del primer trimestre de 2016 del Randstad Workmonitor, si bien el 63% de los trabajadores argentinos sostiene que viajar por trabajo es una carga para su vida personal, un 84% ve a los viajes como un valor agregado de su trabajo. En el mismo sentido, los viajes internacionales parecen ser para los argentinos un anhelo, ya que el 56% refiere que le gustaría que su empleo incluya experiencias en el exterior. El anhelo dista de ser una realidad concreta para la mayoría, ya que sólo el 24% de los encuestados indicó que su trabajo actual contempla viajes al exterior.
“Los viajes por trabajo en general y los internacionales en particular, generan en los colaboradores sensaciones contrapuestas. Por un lado sienten que afectan el ansiado equilibro entre trabajo y vida personal y por el otro los valoran porque les permiten romper con la rutina, ampliar los horizontes de su carrera profesional, desarrollar sus redes de contacto y conocer nuevas culturas. Tal es así que en el relevamiento del primer trimestre de 2016 del Randstad Workmonitor el 80% de los encuestados afirmó que le gustaría trabajar con colegas de culturas diferentes”, sostuvo Andrea Avila, CEO de Randstad para Argentina y Uruguay.
Estos datos se desprenden de la información provista por el Workmonitor, un relevamiento trimestral que realiza Randstad en 34 países del mundo entre Europa, Asia y América sobre las expectativas, estados de ánimo y comportamientos de los trabajadores. El estudio, a cargo de Survey Sampling International, se desarrolló a través de un cuestionario online sobre una muestra compuesta por personas de ambos sexos, de entre 18 y 65 años que trabajan bajo relación de dependencia más de 24 horas por semana. En Argentina la muestra está compuesta por 405 casos.