Llega el receso escolar, la mayoría de los padres solo tienen unas pocas semanas de vacaciones para disfrutar en familia, y organizar actividades que entretengan a los hijos durante el verano se transforma en un motivo de preocupación. Así aparecen las colonias de vacaciones como la gran opción para que los niños pasen un tiempo al aire libre jugando en la pileta, trepando árboles, interactuando con sus pares, y alejados del televisor o la PlayStation.
Sin embargo, existen alternativas diferentes y muy interesantes a la típica “colonia” que pueden resultar todo un hallazgo, especialmente porque cada vez son más los niños que desde muy temprana edad se ven atraídos por la ciencia y la tecnológica.
Así aparecen las “colonias tech” en escena, espacios lúdicos que invitan a los chicos a conectarse con su parte creativa, divertirse y aprender algo nuevo de la mano de disciplinas innovadoras como la programación, la robótica y los videojuegos.
Pionera en la materia, Id Tech es desde 1999 una de las primeras colonias de vacaciones especializadas en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, por sus términos en inglés). Se encuentra en Silicon Valley, epicentro tecnológico de los Estados Unidos, y se enfoca en el desarrollo de habilidades que puedan servir para el futuro laboral de los chicos. Los diferentes programas, orientados a niños y jóvenes entre 7 y 19 años, se enfocan en áreas como diseño, programación, robótica y desarrollo de videojuegos. Cada orientación apunta a que sus participantes exploten sus intereses e inquietudes, sembrando la semilla para una futura profesión en línea con estas disciplinas.
Existen propuestas mixtas, que fusionan el aprendizaje tecnológico con las actividades y beneficios de la colonia de vacaciones tradicional. Este es el caso de Emagination, que desde 1982, ofrece a participantes de Estados Unidos y de todo el mundo distintos programas para que niños y adolescentes expresen su creatividad, desarrollen sus habilidades tecnológicas y hagan nuevos amigos. La oferta de programas incluye: arte digital, photoshop, cortos animados, programación, ingeniería, robótica, junto a todo tipo de actividades recreativas, deportes, natación y juegos al aire libre.
En Argentina también se ha instalado la tendencia de colonias tech, entre las que se destaca Tecnokids. Esta iniciativa ofrece cursos elaborados en colaboración con Google, Lego y YouTubeEdu, líderes de las industrias tecnológicas y educativas actuales. Las distintas propuestas están orientadas a chicos entre 6 y 16 años. A través de la enseñanza de programación, robótica, ciencia, videojuegos, impresión 3D, entre otros talleres, se busca potenciar el razonamiento y las habilidades cognitivas de los jóvenes, fomentar el trabajo el equipo y desarrollar habilidades como el aprender a aprender, fundamentales para el futuro laboral.
También asociada al gigante Lego, NorthROBOTICS ofrece distintas propuestas en programación, robótica y circuitos eléctricos para niños de 5 a 8 años y para jóvenes de 9 a 16 años. En las clases se enseñan diferentes técnicas para la construcción de un robot contemplando desde la mecánica hasta el software y la programación de códigos necesarios para dar movilidad a las extremidades.
Otra propuesta local en las ramas del arte, el diseño y la tecnología son los cursos de introducción al diseño de videojuegos para chicos y adolescentes que ofrece la Escuela de Arte Multimedial Da Vinci, caracterizados por contar con los mismos profesores y recursos que los programas de formación profesional para adultos. En estos cursos, los chicos logran integrar el arte con la programación, aprenden a usar Photoshop, desarrollan y dan vida a personajes, fomentan su costado creativo y logran ganar autoconfianza al llevarse a casa un videojuego creado por ellos mismos.
Independientemente de las particularidades de cada propuesta, el objetivo es potenciar la creatividad desde una edad temprana, incentivar las habilidades relacionadas con la ciencia y la tecnología, preparando a los jóvenes para el futuro del trabajo de la mano de la diversión y el esparcimiento. Las colonias tech cumplen con un doble propósito, desarrollan en los chicos capacidades como la empatía, la colaboración y el trabajo en equipo –propias de cualquier actividad al aire libre- y también ofrecen una formación en habilidades duras, crean un acercamiento a disciplinas complejas como la programación y la robótica, que podrán ser su profesión el día de mañana.